Para lograr el bienestar y la armonía en nuestra vida es indispensable el equilibrio entre la parcela personal y laboral . ¿Cómo desconectar del trabajo? Es una pregunta que nos hacemos con frecuencia, pero para la que pocas veces buscamos solución. En Hammam queremos guiarte hacia ese punto de equilibrio que te desconecta de las preocupaciones y te conecta con tu bienestar.

Fija tus límites en el ámbito laboral

El trabajo es una parte importante de nuestro día a día, pero no podemos valorarlo por encima de nuestro bienestar. ¿Cómo desconectar del trabajo si no aprendemos a fijar límites?

Esto es fundamental para nuestro autocuidado, para poder recargar energías y después ofrecer un rendimiento óptimo en nuestras obligaciones laborales.

Desconectar es necesario para nuestra creatividad y nuestra productividad. Un adecuado descanso es imprescindible para regresar al trabajo con una perspectiva renovada y con ideas frescas e innovadoras.

Aprender a decir ‘no’ y a pensar en ti mismo es entender el valor de tu bienestar para poder ofrecer tu mejor versión. No te culpes por establecer límites, eso no es signo de debilidad. Al contrario, estás protegiéndote, buscando el equilibrio y dando importancia a tu vida personal, donde también tienes que brillar.

Cada faceta de tu vida tiene su parcela y sus tiempos y, de igual modo que no atiendes llamadas o realizas tareas personales mientras trabajas, tampoco es bueno para tu salud mental que hagas lo contrario.

Desconecta del mundo digital

Vivimos en un mundo hiperconectado, con notificaciones constantes, correos electrónicos incesantes y redes sociales omnipresentes. A veces, por cuestiones laborales, es inevitable verse inmerso en esta red. ¿Pero cómo huir de ella fuera de nuestro horario laboral?

Apaga y respira. Abre un espacio para la desconexión. Poner el modo avión te permitirá disfrutar del viaje de tu propia vida y encontrar la paz y el equilibrio sin que nada te recuerde a tus obligaciones laborales en ese tiempo que es para ti y para los tuyos.

Alejarte de la pantalla durante unas horas al día te permitirá disfrutar de actividades para nutrir tu mente y tu espíritu, como pueden ser leer o estar en contacto con la naturaleza. Tener ese tiempo de tranquilidad al alejarte de la sobrecarga de información de las redes sociales te permite centrarte en el presente de tu vida personal y es clave si no sabes cómo desconectar del trabajo.

Desconectar del mundo digital te ayuda a reconectar con tus seres queridos y esos momentos libres de tecnología te ayudan a separar con claridad tus responsabilidades laborales de tu bienestar personal.

Cuida tu bienestar interior

Cuando no sabes cómo desconectar del trabajo, a veces necesitas detener el tiempo para conectar con tu Nauraleza Interior. Para encontrar un equilibrio saludable entre tu vida profesional y personal, cuidar de tu bienestar interior es imprescindible.

Sumergirte en un oasis de serenidad con aguas templadas es un ritual de purificación y renacimiento, que te ayuda a rejuvenecer y te transforma porque te lleva a un estado de relajación total.

Dedicarse a uno mismo de vez en cuando estos momentos es una forma de autocuidado necesaria, pues te permite liberar el estrés acumulado y revitalizar tu cuerpo y tu mente.

Una experiencia en Hammam es mucho más que un baño. Es sumergirte en un ambiente tranquilo, a la suave luz de las velas, envuelto por la música y la atmósfera más reconfortantes. Cada paso del ritual desintoxica tu cuerpo y tu mente y te llena de energía. Por unas horas, piensa sólo en ti y en tu bienestar. Déjate cuidar y desconecta.

Dedica tiempo a intereses y gustos

¿Cuánto tiempo hace que no lees un libro o que no viajas? Muchas veces, vivimos inmersos en las responsabilidades del día a día y en cubrir las necesidades de los demás sin dedicar nuestro propio tiempo a lo que a nosotros nos gusta.

Para lograr el bienestar, debemos dedicar un espacio a las actividades que nos apasionan, ya sea leer, pintar, viajar, cocinar, hacer deporte o ver una película. Permitirnos esos pequeños placeres es clave si no sabemos cómo desconectar del trabajo.

Durante ese rato, nuestra mente encuentra la paz, un refugio de felicidad en el que olvidarse de las preocupaciones laborales. Esto nos permite refrescar y renovar la mente, liberarla de las presiones profesionales y alimentarla de lo que realmente le proporciona bienestar.

Convertir en rutina nuestros pasatiempos te ayuda a recargar energía y eso repercute en tu creatividad y en tu capacidad de resolución de problemas. Mejorará tu estado de ánimo y te mantendrá ocupado en actividades que te hacen olvidar el trabajo durante un rato.

Escucha a tu cuerpo

¿No oyes las señales? Tu cuerpo te avisa y no quieres darte cuenta: dolores musculares, cansancio, jaquecas… Todos esos síntomas te están diciendo basta. ¿Cómo desconectar del trabajo si no te paras a escucharte a ti mismo?

Tu cuerpo te dice que necesita un respiro, que la sobrecarga de trabajo y pensar todo el tiempo en ello no le hace bien, que el descanso es fundamental para seguir rindiendo… Pero no le estás prestando atención.

A veces, el trabajo te lleva a desatender tu alimentación, tu descanso o, en definitiva, tu propia salud. Comer sano y equilibrado, dormir las horas suficientes y practicar deporte de manera regular es vital para tu salud.

Conecta con la naturaleza

La desconexión te llena de paz y, por eso, el contacto con la naturaleza es una excelente manera de revitalizar tu mente y recargar energía. Cuando realizas cualquier actividad al aire libre (ya sea en el bosque, la montaña o el mar), sientes la necesidad de respirar profundamente y de disfrutar del silencio o de los sonidos de tu alrededor.

En la naturaleza encuentras un refugio para tu cuerpo y tu mente, y algo tan simple y tan bello como eso te devuelve el equilibrio. Ya está. Desconecta. Todo lo demás ha dejado de ser importante.