La naturaleza alberga infinidad de propiedades beneficiosas para nuestro organismo. De hecho, muchas son las personas que basan su bienestar en tratamientos naturales hechos a base de plantas y hierbas medicinales. Algunas como la manzanilla, el aloe vera, el eucalipto o el jengibre han ganado una creciente popularidad entre gran parte de la población debido a sus buenos resultados. Sin embargo, pocas personas conocen las múltiples propiedades del diente de león.
En ocasiones el secreto de una piel sana y elástica radica en una buena rutina de cuidado y limpieza facial. Nuestra piel necesita ser mimada y regenerada con productos y tratamientos específicos con los que eliminar impurezas, oxigenarse e hidratarse de nuevo. Nuestra piel necesita resetear, volver al inicio.
La Cátedra Hammam al Ándalus: I+D+i en bienestar humano innovation + research in human wellbeing de la Universidad de Granada nace con un claro objetivo: Facilitar la generación y transmisión del conocimiento sobre los efectos que tienen los modelos clásicos del uso del agua, el masaje y la experiencia holística del baño árabe en el ser humano, tanto a nivel físico y como psicológico.
La práctica de cualquier deporte o de ejercicio de forma regular, está demostrado que no sólo mejora la salud sino que produce beneficios para la mente y los niveles de relajación así como para el estado de ánimo.
Estos meses pasamos más tiempo en casa, lo cual implica compartir también más tiempo con nuestros seres queridos, entre ellos nuestros hijos. Estas prácticas de relajación para niños se convierten en geniales aliadas para respirar un ambiente tranquilo y conciliador en casa.
Las imperfecciones de la cara nos traen de cabeza en más de una ocasión. Por suerte, en Hammam Al Ándalus tenemos la solución. Te sugerimos estos mejores consejos para mantener sanos los poros de la piel.
Durante los últimos años, las redes sociales, Internet o la necesidad de comprobar siempre las notificaciones de nuestro smartphone se han convertido en nuestro pan de cada día. Sin embargo, desconectarse de la tecnología no solo es algo posible, sino también necesario.