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Por influencia de los rituales de belleza coreanos sabemos que una rutina facial diaria nos permite tener una piel bella, radiante, fuerte y llena de vitalidad. Y también sabemos que la doble limpieza de nuestro rostro es el método de higiene ideal, ya que los resultados que ofrece la técnica favorita de las asiáticas son realmente impresionantes.

¿Qué es la doble limpieza facial?

La doble limpieza facial es una técnica para eliminar el maquillaje de nuestro rostro en la que utilizamos dos productos: un limpiador con una base más grasa y otro con una base de agua.

¿En qué consiste la doble limpieza facial?

  1. El primer paso es retirar los restos de maquillaje, protector solar o exceso de sebo con un producto hecho a base de aceite, manteca o leche, en los que es soluble ese tipo de suciedad.
  2. A continuación, procederemos a eliminar los restos con un producto como jabón, gel, etc., para acabar con esa suciedad que se puede disolver en agua (como ocurre con el sudor).

Existen cosméticos específicos para eliminar cada tipo de suciedad y conseguir así una piel limpia y purificada en dos pasos. Además, en El Jardín de Hammam encontrarás productos sostenibles con certificado ecológico y base de aceite de oliva milenario, que te ayudarán a sentirte mucho mejor.

¿Cuáles son sus ventajas para la piel?

Incorporar la doble limpieza facial a nuestra rutina de higiene diaria puede proporcionarnos numerosos beneficios:

  • Podrás eliminar en profundidad todas las impurezas de la piel de tu rostro.
  • Mejorará la textura de tu piel y la verás más luminosa, con más vitalidad, más sana y rejuvenecida.
  • Este tipo de limpieza favorece la aplicación de otros tratamientos de belleza, mejorando considerablemente sus resultados.
  • Puedes reducir residuos y prevenir la acumulación de grasa y, por tanto, la aparición de granos y espinillas.
  • Te ayudará a eliminar células muertas y limpiar los poros de tu piel.
  • Tu piel quedará suave y sin tiranteces.

Y lo mejor de todo es que este método de limpieza facial está indicado para todo tipo de pieles, incluidas las pieles grasas, porque permite eliminar la suciedad y también el exceso de sebo del rostro.

Cómo hacer doble limpieza facial

Es recomendable utilizar productos naturales a la hora de utilizar la técnica de la doble limpieza facial y, además, esta rutina de higiene se puede aplicar incluso si no sueles utilizar maquillaje a diario. Deberás hacerlo al menos una vez al día aunque lo ideal es que se realice el proceso tanto por la mañana como por la noche. ¿Cómo?

  1. Aplica con un suave masaje circular el limpiador de base grasa. Hazlo en el rostro, el contorno de ojos e incluso las pestañas, con los ojos cerrados.
  2. Retira los restos del limpiador graso. Utiliza una muselina (el algodón y las toallitas pueden perjudicar tu piel) mojada en agua tibia y pásala por tu rostro suavemente y arrastrando toda la suciedad.
  3. Aplica el limpiador de base acuosa. Hazlo con abundante agua y enjuaga al terminar con agua fría.
  4. Concluye tu rutina con un tónico facial para reequilibrar el pH de tu piel.

Cuando tengas el rostro impoluto, podrás aplicar otros tratamientos cosméticos para obtener excelentes resultados.