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Planificar una estrategia, decidir cada posición táctica en los movimientos de apertura, ataque y defensa, y decidir la jugada final para dar jaque mate a tu rival. El ajedrez pone a prueba nuestra mente y la hace trabajar de tal manera que potencia nuestras habilidades cognitivas. En Hammam descubrimos cuáles son los beneficios del ajedrez para la mente y el desarrollo cognitivo.
1. Mejora la concentración
Uno de los principales beneficios de jugar al ajedrez es que mejora la concentración, ya que hay que aprender a enfocarse en la partida y a planificar los siguientes pasos en función de los movimientos de tu oponente.
El ajedrez es un juego que requiere prestar atención en todo momento, lo que contribuye a aumentar esta capacidad de concentración, y eso también influye, por ejemplo, en nuestra capacidad lectora.
2. Potencia la memoria
En el ajedrez hay que recordar cada movimiento anterior realizado por nuestro rival para poder anticipar sus intenciones y hacer nuestro propio juego. Esto significa que otro de los beneficios de jugar al ajedrez para el cerebro es que potencia nuestra memoria.
Estimular de esta manera el cerebro es un gran entrenamiento para nuestra memoria, tanto visual como espacial o asociativa. Y este ejercicio, a la larga, nos ayuda a prevenir o, al menos, retrasar la aparición de problemas cognitivos como la demencia o el Alzheimer.
Existen diferentes estudios que demuestran que jugar al ajedrez durante diez minutos al día puede ser muy beneficioso para combatir este tipo de enfermedades.
3. Incrementa la capacidad de resolución de problemas
Cuando jugamos al ajedrez, nos enfrentamos al tablero como un gran rompecabezas que tenemos que resolver, y en el que se van añadiendo constantes obstáculos a medida que avanza la partida. Estos cambios constantes obligan a nuestro cerebro a ponerse en funcionamiento.
Otra de las ventajas de jugar al ajedrez es que aumenta nuestra capacidad para resolver problemas, ya que estimula nuestro razonamiento lógico y nuestras habilidades para anticipar futuros movimientos.
Una de las consecuencias de jugar al ajedrez y de esa mejora de nuestra capacidad de resolución de problemas es la mejora de nuestras aptitudes para las matemáticas, de ahí que sea un juego de lo más recomendable para niños y jóvenes.
4. Puede aumentar el coeficiente intelectual
¿Son las personas más inteligentes las que tienen mejores habilidades para el ajedrez o es el ajedrez el que ayuda a mejorar nuestra inteligencia? Es una pregunta de curiosa respuesta.
Diversos estudios indican que entrenar la mente jugando al ajedrez puede incrementar nuestro cociente intelectual.
Como ya hemos visto, existen diversos beneficios de practicar ajedrez, como la mejora de la concentración, la potenciación de la memoria o la mejora de las capacidades para resolver problemas. Además, otras investigaciones han demostrado que quienes juegan al ajedrez utilizan por igual los dos hemisferios del cerebro, lo que aumenta la capacidad de respuesta. Todo esto mejora nuestras habilidades para el aprendizaje y, en consecuencia, ayuda a incrementar nuestro coeficiente de inteligencia.
5. Desarrolla la capacidad de toma de decisiones y planificación
Como hemos dicho, jugar al ajedrez implica el uso de todas las neuronas de nuestro cerebro, lo que estimula su desarrollo.
Una de las partes del cerebro que más tarda en desarrollarse es la corteza prefrontal, que es la responsable de habilidades como la capacidad de planificación, el juicio o el autocontrol. Jugando al ajedrez, por tanto, permitimos que esta parte de nuestro cerebro se desarrolle antes, lo que ayuda a tomar mejores decisiones.
Efectivamente, otro de los beneficios del ajedrez es que enseña a reflexionar antes de actuar, a valorar las diferentes opciones posibles y a tomar decisiones estratégicas de manera consciente y meditada.
Esto nos hace ver lo beneficioso que es aprender a jugar al ajedrez durante la infancia, ya que los pequeños aprenden a aceptar las reglas y a asumir las consecuencias de sus actos. Y, en la adolescencia, es un juego estupendo para evitar tomar malas decisiones.
6. Fomenta el pensamiento crítico
Uno de los beneficios del ajedrez más obvios es que, por sus características, ayuda a estimular la capacidad de análisis y síntesis.
Como dijimos al principio, el ajedrez permite aumentar nuestra capacidad de concentración, ya que debemos estar centrados únicamente en lo que sucede en el tablero y tenemos que aprender a abstraernos de todo lo que ocurra fuera de él.
Este entrenamiento de nuestra mente para mantener la cabeza en una única tarea nos ayuda a analizar las diferentes opciones posibles en cada movimiento y a desarrollar un pensamiento crítico, valorando de manera sintetizada cuál es la posición en la que debemos colocar cada pieza en nuestro turno.
Esto nos habla de los beneficios del ajedrez hoy en día, en un momento en el que el uso frecuente de dispositivos digitales y redes sociales se ha convertido en un continuo entretenimiento que nos distrae constantemente de otras tareas.
7. Potencia la creatividad y la imaginación
Ya hemos visto que, entre los diversos estudios realizados a lo largo de la historia del ajedrez, se ha demostrado que este juego permite utilizar los dos hemisferios del cerebro al mismo tiempo. Esto significa que también se está estimulando su área creativa.
Durante una partida de ajedrez, no tiene mayor actividad el hemisferio izquierdo, que es el responsable del razonamiento lógico o la capacidad de análisis. También trabaja al mismo ritmo el hemisferio derecho, que evalúa las opciones existentes e imagina cómo se desarrollará la partida en función de si se toma una decisión u otra.
Por tanto, otro de los beneficios del ajedrez que resultan muy interesantes es que es un juego capaz de potenciar nuestra creatividad y nuestra imaginación.
