Algunos entrenamientos se han convertido en tendencia en estos últimos años. Han llegado a nuestra vida por casualidad. A través del consejo de algún amigo o de un artículo que hemos leído en alguna revista sobre salud. Y lo han hecho para quedarse por mucho tiempo. Cuando hablamos de pilates no es solo cuestión de moda. Sino de resultados, bienestar físico y mental… Y, sobre todo, conexión con nosotros mismos.
“La buena condición física
es el primer requisito
para la felicidad”
Joseph Pilates
El pilates se hizo popular allá por la década de los años 20 en EE.UU entre coreógrafos y bailarines. Aunque sea una actividad que recientemente han puesto de moda celebridades. Como artistas del mundo del cine, de la moda o la música. Su creador, Josephus Pilates, acababa de llegar en 1923 de su Europa natal a Manhattan. Y había abierto una academia para fomentar su método personal. En un principio había comenzado a investigar el cuerpo humano, debido a su frágil estado de salud durante su niñez. Que le hacía tener una musculatura muy débil, para así poder fortalecerla e incrementar su vitalidad y energía.
“El equilibrio es la clave para una vida exitosa.
No niegues tu mente, cuerpo o espíritu.
Invierte tiempo y energía en todos por igual;
será la mejor inversión que habrás hecho”
Tanya Wheway.
El pilates es un entrenamiento tan completo porque reúne diferentes disciplinas en un solo método. Seguramente el secreto de tanta perfección se deba a que estás ejercitando el cuerpo y la mente, por lo que incorporarás un mayor equilibrio a tu vida. Al acabar, tendrás la sensación de haber trabajado músculo a músculo de tu cuerpo y tu cabeza estará despejada de preocupaciones. El buen humor y la reducción de estrés son dos de los primeros beneficios visibles. Es normal, ya que durante una sesión de pilates focalizas tu atención en la respiración y en la alineación de tu cuerpo.
El secreto de una mejor calidad de vida
Los resultados son inmediatos y, si tienes constancia, se notarán en muy poco tiempo.
Además de tonificar y moldear tus músculos, ganarás en elasticidad, disfrutarás de una mayor agilidad y de una mejor coordinación de movimientos. Te sentirás más esbelto y estilizado y te encontrarás con más vitalidad. También corriges y mejoras tu postura. Pero sin duda, tres de los beneficios estrella es que fortaleces el abdomen, consigues un control completo de tu cuerpo y aumentas la flexibilidad.
Desterrando mitos
Desde que tenemos uso de razón nos han contado que las abdominales clásicas son lo mejor para lograr un estómago plano y atlético. Parece que lo hemos estado haciendo mal durante toda la vida, o al menos, lo hemos estado haciendo de una manera menos eficaz. Los famosos ejercicios isométricos en pilates, como las planchas para el abdomen o las sentadillas para los glúteos, nos ayudan a ejercitar el músculo mejor, ya que lo hacemos desde la contracción.
Descubre todo un mundo nuevo de ejercicios y buenos hábitos para incorporar a tu rutina diaria y así disfrutar de un mayor bienestar de tu cuerpo, de tu mente y de tu espíritu.
“Eres tan joven o tan viejo como te sientes.
Si tu espalda es rígida con 30 años, entonces eres viejo.
Si consigues que sea móvil y flexible a los 60,
entonces te seguirás manteniendo joven”
Josephus Pilates.
Tal vez me equivoque pero lo dudo, el Pilates no es un Deporte, es una disciplina, un Deporte tiene ciertas características de las cuales fuera de ser planificado, estructurado, institucionalizado y aportar a la «salud» o fortalecimiento corporal el objetivo principal de un Deporte es ganar, y no la victoria moral de ganarse a si mismo si no de forma competitiva con una o varias personas..
Gran artículo sobre el pilates