Con la llegada del frío comienzan también los mitos y costumbres que giran en torno al invierno y las bajas temperaturas. Es cierto que el frío puede afectar a nuestra salud si no protegemos a nuestro cuerpo de ello, pero… ¿Son ciertas todas las afirmaciones y mitos sobre la salud en invierno?

 

Desde Hammam Al Ándalus te contamos qué hay de cierto en esas afirmaciones que durante años nos han dicho para protegernos del frío. ¡Te lo contamos!

¿Afecta el frío a nuestro estado de salud?

Es cierto que el frío puede afectar a nuestra salud. De hecho, es recomendable preparar nuestra piel para la llegada del frío, protegernos ante las bajas temperaturas y ayudar con buenos hábitos a que nuestro sistema inmunológico se encuentre más fuerte que en otros momentos del año. 

 

Es común que el número de hospitalizaciones por problemas respiratorios o cardiovasculares aumente precisamente durante las temporadas de mayor frío. Además, los colectivos más vulnerables deben extremar las precauciones y cuidar su salud para evitar ponerse en peligro. 

 

Sin embargo, esto no quiere decir que todo lo que se cuente sobre el frío y su impacto en nuestra salud sea cierto. Existe una gran cantidad de mitos sobre la salud en invierno, y no todos se ajustan a la realidad.

 

5 mitos sobre la salud y el frío

Cuando la temperatura baja, aumenta el riesgo de resfriados y puede ser precisamente ese temor lo que provoca el crecimiento de mitos relacionados con la salud y el frío. 

 

De hecho, seguro que en más de una ocasión te han dicho que no puedes tomar cosas frías en invierno, que el frío se coge por la cabeza o que necesitas comer más para aumentar tu temperatura corporal, ¿verdad? 

 

Pues todos son mitos y ¡no son los únicos! Te contamos algunos más:

 

Mito 1: “El clima frío enferma”

Sí, es cierto que cuando las temperaturas son menores, la probabilidad de resfriarse es mayor, ya que, entre otros motivos, pasamos más tiempo en interiores para disfrutar de una temperatura más cómoda. Este hecho hace que el intercambio de gérmenes sea más fácil y rápido. 

 

Mito 2: “En invierno no tendrás alergia”

Esta afirmación suele hacerse por las personas que presentan alergia estacional a flores, plantas y vegetación que florecen principalmente en primavera. Sin embargo, es precisamente en invierno cuando las alergias a los ácaros, al moho y a la caspa de los animales suele aumentar debido a que la ventilación de interiores es menor. 

 

Mito 3: “Por los pies se cogen los resfriados”

Eso de que el frío entra por los pies es una gran leyenda que ha ido pasando de generación en generación. Es cierto que los pies es una de las zonas del cuerpo que se enfrían con mayor rapidez, pero los resfriados se cogen al inhalar el virus por el sistema respiratorio. Por lo tanto, ni las manos ni los pies tienen nada que ver en este proceso. 

 

Mito 4: “Te resfriarás si sales con el pelo mojado” 

Lo que provoca un resfriado es la presencia de determinados virus en nuestro organismo, no el pelo mojado. Es cierto que los virus se sienten más cómodos en ambientes fríos, pero el pelo mojado no será la causa por la que podrás enfermar, ya que podrás coger un resfriado estés con el pelo mojado o no. 

 

Mito 5: “No es bueno hacer ejercicio con frío”

Lo cierto es que practicar ejercicio con temperaturas bajas puede ser mucho más beneficioso para la salud que hacerlo con temperaturas altas. Ejercitar nuestro cuerpo en invierno exige de un mayor esfuerzo, lo que implica una mayor quema de calorías y una mayor producción de endorfinas.