¿Por qué nos empeñamos en buscar la felicidad cuando podemos encontrar el placer? La felicidad es demasiado importante, una bendición del universo y abarca toda la vida de una persona, por eso alguien dijo que nadie sabe si ha sido realmente feliz hasta el último suspiro. En cambio el placer pertenece al momento. Es corto y depende de uno mismo, de la sencilla capacidad de aprovechar lo que tiene alrededor, de tanta belleza como se nos ha regalado por las buenas. En el fondo estamos más hechos para el placer que para la felicidad. Y de hecho no cesamos de idear nuevas fuentes de entretenimiento, que no logran superar a los milenarios santuarios dedicados a la conexión del cuerpo con el agua, con la vida, con el origen de todo. Porque el hammam es un santuario dedicado al arte de sentir. Por lo que es aconsejable que antes de entrar, dejes fuera los pensamientos, las preocupaciones, incluso los sueños pues una experiencia nueva te espera en todo su profundidad.
Cuántas veces nos hemos preguntado por el verdadero secreto de la felicidad. Si fuera tan fácil, probablemente este remedio milagroso se publicaría de forma generosa en los periódicos de todo el mundo. Lo cierto es que, aunque no hay una solución que funcione para todas las personas por igual, un estudio de ámbito global que ha hecho Booking.com revela que un tanto por ciento muy grande de la humanidad es más feliz cuando viaja.
Decía el escritor Eduardo Galeano “la utopía está en el horizonte. Camino dos pasos, ella se aleja dos pasos. Camino diez pasos y el horizonte se desplaza diez pasos más allá. Por mucho que camine nunca la alcanzaré”. Entonces, se preguntaba, “¿para qué sirve la utopía? Para eso: sirve para caminar”. La confianza es uno de esos valores que alguna vez hemos llegado a tocar con la punta de los dedos y justo en un espacio de tiempo muy corto, se distancia milimétricamente de nosotros para empujarnos a buscarla sin cesar. Pocos la experimentan por temporadas continuas y la mayoría nos dedicamos a perseguirla por el resto de nuestra vida.
A Clara Sánchez le llegó la avalancha de reconocimientos cuando publicó Lo que esconde tu nombre (Destino, 2010), que ganó el Premio Nadal de Novela en España, además del Premio Roma y el Baccante en Italia, entre otros. Con ella vino su mayor éxito literario, también en el mercado internacional. Esta novela narra la vida de Sandra, una chica de 30 años que decide retirarse a un pueblo de la costa alicantina. Ha dejado el trabajo y está embarazada de un hombre del que no está enamorada. Allí se encuentra con una pareja de noruegos octogenarios, que enseguida se convierten en su principal apoyo. La autora ha confesado que aquel libro gustó mucho. “Creo que lo que se escribe, si se hace verdaderamente desde dentro, si no es impostado, puede llegar a mucha gente”. Y es que esta novela se convierte en un relato de terror y está inspirado de una historia que le pasó a la escritora relacionada con el nazismo. El resultado fue que, tanto en España como Italia, se convirtió en una de las novelas más vendidas de la última década y se publicó en veinte países.
Cámara de las maravillas es la primera exposición individual de Mark Ryden en Europa. Esta muestra ha revolucionado las redes sociales de medio país. Todo el mundo quiere visitar el CAC de Málaga para ser testigo de este hito artístico. Si aún no la has visto, es el momento de coger las maletas y hacer una escapada a la Costa del Sol. Ya que estará abierta al público hasta el 5 de marzo.
El hammam, o la renovación de la vida, por Joaquín Pérez Azaústre. La presencia salvífica del agua, asentada en su manto nítido de basalto y tibia claridad, es una redención para el espíritu. Nacemos con el año que comienza. Nacemos con la cifra mercurial de una renovación en carne viva.
El espectáculo que la vida nos ofrece a diario es asombroso. Descubrimos escenarios simétricos y perfectos, que nos gritan sin voz que la naturaleza que nos envuelve es poderosa y que, antes de nuestro paso por el mundo, hubo otras civilizaciones, siglos atrás, que nos dejaron legados preciosos. Lo maravilloso es que muchas de estas herencias están interconectadas por el mundo, haciendo que todos los pueblos del planeta se sientan hermanados.