Los misterios más grandes de la historia se esconden en un número que nos inquieta. Y nos deja algunas pistas sobre sus secretos en jeroglíficos cargados de enigmas sin respuesta. 7 son los colores del arco iris, los pecados capitales, las notas musicales y las grandes artes de la humanidad. También son 7 los días de la semana, todos los que tenemos para soñar e imaginar.
600 años atrás, en Anatolia, Turquía, las mujeres y los hombres cubrían su cuerpo con un pestemal durante el ritual del hammam. Las cualidades de esta prenda son tan extraordinarias, que seis siglos después sigue siendo imprescindible y su uso ha trascendido las bondades del baño turco.
Cuenta la leyenda, que más allá de Dioses y Olimpo, existen historias, que aunque sucedieran entre mortales, dejan al que las escucha con la boca abierta y el corazón en vilo. Mi abuela siempre decía que eso prueba que los humanos estamos entre dos dimensiones toda nuestra vida, la terrenal y la estelar.
Hubo un tiempo en el que Europa estaba sumergida en un oscurantismo alejado de ciencias y conocimiento. Gracias a los árabes, el misterio y la magia de galaxias y estrellas lejanas nos fue traído a un plano más próximo. Incluso se construyeron las llamadas tablas astronómicas, donde se recogía el movimiento y posición exacta de los cuerpos celestes. Siglos después continuamos celebrando este ritual de saber y belleza con las Astronoches de Hammam Al Ándalus.
– ¿Y esta historia que me vas a contar sucedió cerca de aquí?
– Muy cerca, vamos paseando hacia allí… El relato comienza en calle Ollerías
Hay semanas que gusta vivirlas por los momentos tan especiales que nos dejan: Esta es una de ellas. No solo por el día festivo (doble en el caso de este fin de semana en Madrid y Granada, donde se celebran el Día de la Comunicad y las Cruces, respectivamente), sino porque acabamos rindiendo homenaje a la persona más especial de nuestras casas: las madres.
Pero, ¿cuál es el origen de esta celebración? ¿por qué se elige el primer domingo de mayo para agasajar a las mamás?
Cita la Wikipedia que las primeras celebraciones del Día de las Madres se remontan a la antigua Grecia. Entonces, se producían festividades en honor de la diosa a Rea, madre de Zeus, Poseidón y Hades. La fiesta fue evolucionando con el paso de los siglos y la llegada de otras civilizaciones, de tal manera que los romanos llamaron a esta celebración ‘Hilaria’ cuando la adquirieron, como tantas otras cosas, de los griegos. Entonces ya se acercaba esta celebración a la primavera. Era habitual realizar una celebración en el templo de Cibeles y durante tres días se realizaban ofrendas.
Los católicos adaptaron la celebración para honrar a la Virgen María, la madre de Jesús. Fue el presidente estadounidense Woodrow Wilson quien en 1914 decretó el Día de la Madre como el primer domingo de mayo en Estados Unidos. Así, fue gestado el día internacional de la madre que después fue encontrando eco en otros países que lo adoptaron hasta tenerse la celebración conocida en la actualidad.
¿Y tú? ¿Cómo celebrarás esta festividad?
Este año, por San Valentín ofrecemos a nuestros clientes una sorpresa muy especial fruto de la colaboración con Ovio, una importante marca de artesanos cordobeses que diseñaron, inspirados en una moneda andalusí acuñada en el siglo XI, un magnífico catálogo de joyas.
Hace algún tiempo tuvimos un afortunado encuentro con Ovio, la prestigiosa firma cordobesa creada por los hermanos Rafael y Juan Ponce, dos grandes artesanos de la plata con una larga experiencia y una gran marca creada, curiosamente, el mismo año en que Hammam Al Ándalus comenzó su camino: 1998.
Una de las cosas que más llamó nuestra atención de Ovio fue su seña de identidad: una antigua moneda acuñada en Medina Azahara, un dírham de la época califal. Ni que decir tiene que empezamos a entendernos inmediatamente. Sus productos, de un estilo exquisito, engarzaban perfectamente con nuestra filosofía y nuestra imagen: más allá de un cuidado diseño y carácter andalusí, los productos de Ovio en cualquiera de sus colecciones van hacia lo emocional, son mucho más que la unión de varios elementos: poseen alma.
Un trabajo exquisito
Desde el principio surgió la colaboración. Se pusieron manos a la obra y crearon para un delicado modelo compuesto por su moneda insignia y nuestro símbolo. Tras los diseños iniciales hicieron primero las maquetas en cera, luego los moldes y finalmente procedieron a su fabricación. El resultado, una hermosa pulsera y una insistente pregunta: ¿Cómo no habíamos hecho esto antes?
Aprovechamos para presentarla en una fecha muy especial para nosotros y nuestros clientes: por San Valentín. En todos nuestros baños árabes, hasta el día 13 de Febrero, los clientes que adquieran tarjetas regalo –físicas, no online- de cualquiera de nuestros rituales (Ritual Al Ándalus, Ilbira, Omeya, Almudaina o Nazarí) recibirán de regalo esta exquisita pieza de Ovio. Ojo que hay un número limitado de pulseras, hasta acabar existencias, así que no tardes en venir al Hammam a comprar el regalo de San Valentín para tu pareja.
Pocos minutos después de empezar la promoción, ya lo han recibido algunos clientes, que se han llevado una grata sorpresa. Era un secreto que estábamos preparando con mucha ilusión y cariño.
Estos son los inicios de una hermosa colaboración donde ambas empresas han aportado ilusión, emoción y talento y cuyo resultado va más allá de una pieza más, es un trozo de nosotros que llevarán nuestras clientas allá donde vayan y que sin duda les traerá fortuna y buenas vibraciones.