A veces, nuestra piel presenta imperfecciones que no podemos controlar, pero que podemos prevenir o combatir si cambiamos algunos de nuestros hábitos de vida. Ocurre, por ejemplo, con la piel de naranja, un problema estético que parece incorregible, pero que en Hammam sabemos cómo mejorar.

¿Qué es la piel de naranja?

Se conoce como piel de naranja al aspecto rugoso e irregular que presenta la piel cuando se sufre de celulitis. Generalmente, se pueden percibir hoyuelos y nódulos en la superficie cutánea que son consecuencia de la acumulación de tejido adiposo o graso.

Se trata de un problema dermoestético que suele aparecer, sobre todo, en la zona de las piernas, los glúteos, las caderas y el abdomen -es decir, las regiones ginoides-, y que afecta principalmente a las mujeres.

En contra de lo que se cree, la piel de naranja no tiene nada que ver con el sobrepeso y tampoco con la edad, pero se desconocen las causas exactas de su aparición. Eso sí, hay varios factores que influyen:

  • Los cambios hormonales.
  • Un estilo de vida sedentario.
  • Una mala alimentación.
  • La retención de líquidos.
  • El uso de ropa muy ajustada.

También puede haber factores genéticos en su aparición, ya que las personas que tienen ascendentes con piel de naranja son más propensas a padecerla.

¿En qué se diferencia de la celulitis?

La principal diferencia entre la celulitis y la piel de naranja es que la primera es una afección estética, mientras que la segunda es la consecuencia visible que esta deja en la piel.

No se puede considerar la celulitis como una enfermedad sino como una alteración estética de la piel que, según se cree, se desarrolla por factores hormonales, principalmente. Es por esto por lo que durante la pubertad, el embarazo o la menopausia suele ser más notable, ya que también es a las mujeres a las que más afecta.

Consejos para eliminar la piel de naranja

Unas piernas con piel de naranja suelen presentar flacidez, rugosidad y acumulación de grasa. Aunque se trata como un problema metabólico, lo cierto es que es más una cuestión molesta que, para muchas personas que lo sufren, puede resultar antiestética. ¿Cómo quitar la piel de naranja?

  • Beber mucha agua te ayudará a tener la piel hidratada y esto es clave para evitar la aparición de la piel de naranja. Evita los refrescos, el té y el café. ¡El agua es fuente de salud!
  • Cuida tu alimentación. Llevar una dieta saludable evitará la acumulación de líquidos y de tejido adiposo en tu piel y permitirá que esta esté libre de toxinas.
  • Haz ejercicio regularmente. Esto combatirá la mala circulación y la insuficiencia linfática y te ayudará a mantener tu peso ideal.
  • Exfolia tu piel para eliminar las células muertas y favorecer el flujo sanguíneo. Es uno de los mejores remedios contra la piel de naranja y, por eso, en Hammam te recomendamos hacerlo con productos naturales como el guante de kessa, que tiene muchos beneficios para la piel.
  • Evita utilizar prendas ajustadas porque eso perjudica a tu circulación sanguínea. Es mucho mejor utilizar prendas cómodas y holgadas para que la piel se recupere.
  • No consumas alcohol ni tabaco. Esto agravará este y otros muchos problemas que afectarán muy negativamente a tu salud.

Cuidarnos por dentro nos ayuda a reflejarlo por fuera y, a veces, los gestos más sencillos son los que nos proporcionan mayor bienestar.