Granada, escenario idílico para soñar. Territorio de convivencia de culturas. Refugio de artistas e intelectuales. Lugar donde la tradición y la modernidad coexisten sin pisarse, complementándose y enriqueciéndose. Ciudad para la experimentación en la música, en la literatura, en el cine… El único rincón en la tierra donde podría haberse desarrollado un proyecto como Cinemística. Un festival que que este año celebra su tercera edición y del que Hammam Al Ándalus es el patrocinador oficial. Hablamos de su historia, de luz y de agua con su director y fundador, Manuel Polls Pelaz.
Hammam Al Ándalus: ¿Cómo surge Cinemística y cuál es su principal foco de atención?
Manuel Polls Pelaz: Cinemística es un género cinematográfico. Propuse esa palabra compuesta durante los años, 2002-2010, que viví en una casa-cueva del Sacromonte de Granada. Palabra absolutamente fácil de entender, y sin embargo compleja, “laberística”, tal vez más difícil todavía de practicar, por eso es atractiva. Se trata de un peregrinar en el cinematógrafo. Ese término nació porque había un concepto detrás, suficientemente desarrollado, el de la mística en el viejo y siempre nuevo arte cinematográfico. Evidentemente nos referimos a la espiritualidad en el arte, en el sentido que hablaron Kandinsky, Tarkovski, Val del Omar. En aquel mismo periodo yo me bauticé como “cinehasta”, por la impermanencia del oficio y por el “h” intercalada, esa letra muda que representa el vacío necesario en el centro del discurso artístico. Un vacío alentador, seductor, atractivo. Me considero un cinehasta que ejerce su cinemística. Al cabo de unos años con Elena decidimos organizar un festival para este tipo de trabajos, para el “otro cine”. Fue en 2014…
Hammam Al Ándalus: ¿Cómo explicarías al espectador en qué consiste el cine trascendental?
Manuel Polls Pelaz: No se trata de contenidos trascendentales, en el sentido de alejados de nuestra realidad, o inaccesibles, sino de un estilo artístico en la forma de filmar. El director y crítico Paul Schrader propuso en 1973 ese estilo para referir la obra de Yasuhiro Ozu, Robert Bresson y Carl Theodor Dreyer. Recientemente yo he ampliado el abanico de ese estilo trascendental, clasificándolo en 2 posibilidades cinematográficas: La haplética (sencilla, ascética), y la periplética (compleja). En la segunda categoría entrarían directores como Bergman, Antonioni, Greenaway, Jodorowski, Sokurov, Tarkovski, Godard, etc., cuya obra tiene estilo trascendental, más complicado en la forma, realización y montaje, que los referidos por Schrader para Ozu, Dreyer y Bresson. Lo que marca el estilo trascendental es la mirada y la forma de realizar un film, más que el tema escogido. La relación del autor con la fenomenología de este mundo, de las relaciones humanas, de lo contemplativo, de lo que puede ser dicho, ni visto ni oído. De lo que no ocurre, de un paisaje indecible pero fotogénico, cuyas formas, circundadas por el vacío, “hablan”…
Hammam Al Ándalus: Este año el festival celebra su tercera edición, ¿cómo ha sido la evolución durante estos tres años de festival? y ¿cuál ha sido la acogida de la ciudad de Granada del festival Cinemística?
Manuel Polls Pelaz : En 2016 nos han llegado cerca de 3000 títulos de 46 países, lo cual nos obligó a retrasar las fechas, tal era la inmensa labor de estudiar cada uno de los trabajos en el proceso de selección. Festival Cienmística es ya un pequeño-gran referente internacional, tal vez el único certamen especializado en este tipo de cinematografía. Granada es un viaje inmóvil, ha acogido el milagro de este improbable pero necesario festival. Increíble, ahora los granadinos empiezan a acercarse a la milagrosa cueva del cinematógrafo.
Hammam Al Ándalus: Cada año dedicáis el festival a un concepto y este año gira alrededor del azar. Cuéntanos un poco más sobre esto.
Manuel Polls Pelaz: La idea es hablar de las ideas, en un lugar común que es el rito cinematográfico, que yo creo fundamental en nuestra sociedad. Una liturgia antropológica en la que nos reunimos a oscuras para ver un haz de luz atravesando el aire y convocando en un lienzo la representación del mundo de alguien que se ha dedicado a captarlo en movimiento. Estamos solos y juntos a la vez durante la proyección. Eso es crucial. Y luego hablamos de la película que ha visto cada uno: no hay dos idénticas. Cada año nos reunimos alrededor de un tema universal. Este año es el azar, y su cómplice y enemigo íntimo, el determinismo. Son cuestiones transversales a todas las artes y las ciencias, inherente al devenir de cada partícula de nuestro mundo incluidos nosotros mismos. ¿Somos fruto del destino o del azar? ¿Tiene sentido plantear la disyuntiva? El misterio de la existencia y de la no existencia.
Hammam Al Ándalus: Uno de vuestros referentes es el granadino Val del Omar que dice que “Lo extraordinario está en las entrañas de lo ordinario”. Muchas veces nos encontramos con opuestos en nuestra vida que no están tan enfrentados. En cierto modo Cinemística juega entre esos dos conceptos, donde caben la experimentación y la libertad a la hora de recibir propuestas. ¿Qué tipo de propuestas soléis recibir?
Manuel Polls Pelaz: Nuestro festival tiene unas bases que prácticamente se resumen en que no hay bases. Eso sí, apelamos a la conciencia de los autores a que consideren ellos mismos si su obra va en la dirección planteada en la filosofía del certamen. Este años hemos seleccionado 187 maravillosos títulos, algunos de ellos indescriptibles en el espacio de una entrevista.
Hammam Al Ándalus: El año 2015 fue proclamado el año de la luz y la UNESCO incluyó a Cinemística en su programa internacional y nacional. Cuéntanos más acerca de esta mención especial y también acerca de la relación del festival con la luz.
Manuel Polls Pelaz: Se declaró así por la UNESCO, debido al centenario de la relatividad general de Albert Einstein. Yo tuve un pasado científico, cada vez más lejano, pero sigo curioseando en la actualidad de la ciencia, conservando algunos buenos amigos. Entre ellos Carlos Barceló, el eminente físico teórico español, especialista de la luz, la gravedad, los agujeros negros. Carlos es muy cinéfilo y nos animamos con el tema. Vinieron muchos científicos a los coloquios, pero también lingüistas, poetas, religiosos, psicólogos, antropólogos. La luz está en todo, por supuesto también en el cinematógafo, aunque paradójicamente Cinemística fue el único festival en añadirse a dicha efemérides. ¡Somos luz!
Hammam Al Ándalus: Este año es la primera vez que Hammam Al Ándalus colabora con Cinemística como patrocinador, ¿cómo valoras esta unión?
Manuel Polls Pelaz: También somos agua. Yo tengo una gran afinidad por mi pasado científico con el agua, y mis films a menudo se ocupan de ella. Hice una película-río (“Recuerdos de un Olvido” 2008), un corto sobre las lágrimas de Rousseau (“El don de lágrimas” 2012), y anteriormente otro sobre un naufragio anónimo (“Fuego en el lago”, 1999). El agua en sus diferentes estados me seduce por su fotogenia y misterio. Con Marichu y José, fundadores del Hamman, congeniamos primero en lo personal y cinematográfico, y afortunadamente luego también en el trabajo del festival. Todo fluye de maravilla…
Hammam Al Ándalus: Cinemística es un festival que se demora en el tiempo y dura un mes. Normalmente los festivales son más breves, ¿por qué habéis elegido este formato?
Manuel Polls Pelaz: Un mes es razonable, en el sentido que nos permite profundizar suficientemente en los temas tratados. No se trata de hacer algo efímero, sino algo relativamente perdurable. Lo bueno si dura, dos veces bueno.
Hammam Al Ándalus: En Cinemística no solo participan cineastas, sino que se dan coloquios muy interesantes entre profesionales de muchas disciplinas: matemáticos, geólogos, arquitectos… ¿es un festival que trasciende la gran pantalla para hablar de cosas extraordinarias?
Manuel Polls Pelaz: Las cosas extraordinarias están por doquier, en lo ordinario. Basta con detenerse a contemplarlas y conservar capacidad de asombro. Queremos asombrarnos lo máximo posible, y los coloquios tras las proyecciones nos permiten entrar en un proceso que roza el trance colectivo. Surgen opiniones imprevistas incluso para los que las emiten, y se sale finalmente en un estado de agradable catarsis individual y grupal. Insisto en la necesidad de recuperar el rito antropológico, el del viejo y siempre nuevo arte del cinematógrafo. Como dices este año vendrán “magos” de muchas disciplinas, a conducir las sesiones: desde la arquitectura a la lingüística, pasando por la medicina y la música.
Hammam Al Ándalus: Por último, nos gustaría que enviaras una invitación a nuestros lectores para que no se pierdan esta edición de Cinemística.
Manuel Polls Pelaz: Vengan a SER festival, experiencia muy recomendable…
