Hay caricias que no solo rozan la piel, sino que descienden a territorios más hondos, allí donde habita el alma. El masaje sensitivo en Hammam Al Ándalus es uno de esos rituales, un recorrido sereno que despierta los sentidos y reconcilia el cuerpo con su propio pulso esencial.
El día a día nos enfrenta a situaciones estresantes que no nos dejan tiempo para pararnos a pensar en el presente. Ponemos el piloto automático y nos dejamos llevar, sin apenas darnos cuenta de las tensiones que acumulamos. Darse un respiro se convierte en una necesidad para recuperar la energía y debemos ser conscientes de la importancia de desconectar para volver a conectar.
Tras un masaje esperamos una sensación de ligereza y liberación de cargas, como dar al botón de reinicio para volver a nuestra vida cotidiana con la energía recargada. Sin embargo, ese estado de armonía en el que el cuerpo y el espíritu se sienten rejuvenecidos tiene que transicionar después hacia una curación más profunda. Esto implica la aparición de una serie de efectos y sensaciones que permanecen después de un masaje descontracturante que no siempre son agradables pero que debemos conocer porque son completamente normales dada la naturaleza de las técnicas que se emplean.
La relajación progresiva es una técnica milenaria que pone el foco en la conexión entre nuestra mente y nuestro cuerpo. Las técnicas de relajación muscular progresiva nos llevan hacia el bienestar y la relajación profunda, basándose en la tensión-distensión de nuestros músculos.
En los primeros años de la vida de las personas se establece un apego o vínculo afectivo entre el bebé y sus padres o cuidadores. Esto tiene repercusión en el desarrollo psicológico y en la formación de la personalidad durante la infancia, y tiene la función de proporcionar seguridad al niño ante situaciones de amenaza. Estos vínculos pueden ser de diferentes tipos y se desarrollan por muy diversos factores. Por eso hay actividades específicas para mejorar vínculos afectivos.
“Padmasana” es mucho más que el arquetipo de el asana para la meditación. “Padmasana” es una puerta abierta hacia la pureza del cuerpo, el alma y la iluminación; es una fuerte predisposición con la que comenzar a conectar mente, cuerpo y respiración.
Las salas de vapor no son solo espacios de misterio que nos envuelven para trasladarnos a un estado de calma. Desde el punto de vista de la salud física y espiritual, son muchos los beneficios de los baños de vapor. Conoce con Hammam Al Ándalus sus principales propiedades.