Julio Romero de Torres. El mes de noviembre tiene nombre y apellidos en Córdoba. Y sobre todo tiene matices, texturas y una paleta de colores propios. Por quinto año consecutivo Érase una vez Córdoba nos da la posibilidad de conocer más de cerca la figura del pintor. A través de visitas guiadas, conferencias y tertulias para todos los públicos.
Cómo nace este proyecto
Érase una vez Julio Romero de Torres celebra este año su quinta edición. Pero, ¿cómo comenzó este proyecto tan especial dedicado al pintor de La chiquita piconera? En 2014 se cumplían 140 años del nacimiento del artista. Y el equipo de Érase una vez Córdoba decidió rendirle un merecido homenaje con una visita guiada conmemorativa.
Érase una vez Córdoba es un proyecto de rutas diferentes y gestión cultural creativa en esta ciudad. Su director, Teo Fernández, nos cuenta que muchas entidades públicas y privadas, en total quince, se volcaron con la idea. Desde entonces, noviembre es el mes de Julio Romero de Torres. Y las personas que pasen por la ciudad durante estos días pueden disfrutar de un gran número de actividades. En ocasiones, por una cantidad muy simbólica. Este año, la novedad es que, por primera vez, la Junta de Andalucía está apoyando este proyecto tan necesario.
Actividades todo el mes
Las actividades comienzan un día antes del cumpleaños de Julio Romero de Torres, el 8 de noviembre, con una visita de alumnos del Grado de Gestión Cultural de la UCO al Museo Julio Romero de Torres. Serán guiados por Érase una vez Córdoba. A partir de ahí habrá diversas visitas guiadas por Érase una vez Córdoba al Museo Julio Romero de Torres y a la sala Tesoros Cajasur del Palacio de Viana, que alberga cuatro obras del pintor cordobés. Las plazas de las actividades son muy limitadas y es imprescindible su reserva.
Cada edición es más especial
La organización de Érase una vez Julio Romero de Torres y las entidades de la ciudad se esfuerzan por hacer cada año la edición más memorable. En esta ocasión destaca la recuperación de la película de 1940, Julio Romero de Torres, de Julián Torremocha. Que recoge fragmentos de metrajes anteriores. “En ella podemos ver al pintor vivo, paseando por Córdoba y los jardines de su casa”, nos cuenta María del Mar Ibáñez, archivera de la Junta de Andalucía.
No se tenía constancia de este filme. La primera noticia llega en los años 80, cuando la Junta de Andalucía adquirió el legado de la familia Romero de Torres. Hace dos años se digitalizó. No conserva su sonido. Pero lo especial de este documento histórico tan importante es que la recuperación del guión original. Gonzalo Herrero podrá ponerle voz en directo el próximo jueves, 22 de noviembre, en la Filmoteca de Andalucía.
Posteriormente se celebrará un coloquio con personas grandes conocedoras de la vida del pintor, como José María Palencia, director del Museo de Bellas Artes o María del Mar Ibáñez, Archivera DT Conocimiento. El lunes 26 de noviembre se celebrará la conferencia El archivo de la familia Romero de Torres o la pasión por el patrimonio.
Refinamiento y embrujo en un estilo
Julio Romero de Torres nació el 9 de noviembre de 1874 en la ciudad de Córdoba.Tuvo la fortuna de crecer en una familia de artistas. Luego se convertiría en uno de los pintores simbolistas más importantes de España. Julio comenzó a pintar desde muy joven. Primero con un estilo regionalista. Que se fue adhiriendo a la estética del 98 y del modernismo, triunfante en España en aquellos días. Unos años después, en 1908, comenzó a adquirir un estilo personal. “Que combinaba sentimiento popular y genuino folclore, en una línea andalucísima, plagada de refinamiento y embrujo”.
Gracias a Érase una vez Córdoba podremos viajar a esa época en la que Julio Romero de Torres y Valle Inclán charlaban en el estudio del pintor. Rodeado de fotografías de mujeres, a las que este retrató durante toda su vida. Serán once días en total de actividades dedicadas a conocer mejor el legado artístico que el pintor cordobés nos dejó. Puedes consultar horarios y lugares de celebración en la web de Érase una vez Córdoba.